Sierra de Ahillos. Su altitud es de 1455 metros y en
ella se encuentran el mayor número de encinares mediterráneos. Se trata de una zona con
grandes valores botánicos, geológicos, paisajísticos y de fauna, donde abundan chaparrales y retamales principalmente, aunque aún quedan
varias encinas de gran porte. Se encuentra al nordeste deAlcaudete, a 7 kilómetros, por la carretera local JV-2.214.
Sierra de Chircales. Es un área forestal de gran interés
natural, donde podemos encontrar varias especies del
bosque mediterráneo autóctono como encinas, chaparros y retamas. A unos 10 kilómetros deAlcaudete, se
accede por la carretera local JV-2.214.
Fuente Amuña.Emplazada al norte deAlcaudete, en las afueras
del casco urbano, se trata de un manantial que drena una "charca" donde reside un grupo de patos comunes. Cuenta con una zona de recreo dotada de aparcamientos, merenderos y barbacoas.
Lagunas. Existen tres lagunas en la zona de alto
nivel
ecológico: la Laguna de Tumbalagraja, Laguna Honda y la Laguna del Chinche.
Embalse de Vadomojón. Este embalse de nueva
construcción es el resultado dela unión de los ríos
Guadajoz y Víboras. Se trata de un pantano detamaño medio emplazado en la intersección del río Víboras con el Guadajoz, justo en el límite con la provincia de Córdoba. Está ubicado en plena campiña olivarera, que se alterna con profundos barrancos de tomillares y
esparto. Muy cercano a las reservas naturales dela Laguna Honda, Laguna del Chinche y Laguna del
Conde, supone un atractivo más para las aves acuáticas de estos espacios naturales. Tiene acceso directo desde la Vía Verde del Aceite, que atraviesa su perímetro sur, y es un lugar ideal para practicar cicloturismo, paseos a caballo, senderismo, pesca, actividades
deportivas, acampada, etc. Situado a 10 kilómetros deAlcaudete, se accede por las carreteras locales en
dirección a Noguerones.
Vía Verde del Aceite. El proyecto "Vía Verde del Aceite" se presenta como una nueva y atractiva oferta de turismo interior, basada en el aprovechamiento de un antiguo trazado ferroviario como pasillo verde, ideal para
realizar actividades deportivas, cicloturismo, senderismo, paseos ecuestres, etc.Se trata, en definitiva, de una nueva forma de turismo alternativo, consciente y responsable con el medio ambiente, que conecta al turista con los elementos naturales, culturales y costumbristas del
territorio por el cual transcurre el ferrocarril.