Existe la tradición de que el comienzo de la devoción a la patrona de Alcaudete, se originó en las proximidades de una fuente, de donde le viene el nombre de Fuensanta a la Patrona de Alcaudete, contracción de fuente-santa, y que cerca de ella se levantó la primitiva ermita.
La situación de la fuente y su ubicación quedaron plenamente confirmados durante la construcción de la actual ermita. En efecto, los trabajos de cimentación y de los múltiples pozos que habían sido perforados en sus proximidades, en el lugar que ocupaba la antigua ermita manaba una fuente con abundante agua, lo cual dificultó las obras de construcción de la nueva ermita de la Patrona.
La situación de la fuente corresponde precisamente con la del camarín donde se encuentra y se encontraba la Virgen de la Fuensanta.
Cuentan que la ermita se levantó en su día en el lugar donde un soldado cristiano malherido durante una escaramuza con los musulmanes en la Reconquista fue llevado por sus compañeros de armas a las proximidades de la fuente existente cerca del lugar en el que se había desarrollado el encuentro con el enemigo. El soldado tomando agua de aquella fuente, pues su pérdida de sangre era muy alarmante, invocó a la Virgen y aunque su estado era grave sanó sorprendentemente en poco tiempo.
Localización
Subiendo por el paseo del Parque Nuestras Señora de la Fuensanta, a la finalización del mismo, a un kilómetro aproximadamente se encuentra la ermita de la patrona de Alcaudete y junto a ella una fuente que da testimonio del primitivo manantial.
Fuentes: Libro "Ruta de las Fuentes"
Autores: Francisco Molina Aranda – Voluntariado Medioambiental Flor Espliego